TRATAMIENTO
DE PARADAS CARDÍACAS MEDIANTE DESFIBRILADORES SEMIAUTOMÁTICOS
Fuente.SERCAM
IMPORTANCIA
Y JUSTIFICACIÓN
La muerte súbita de origen cardíaco continúa
siendo un problema sanitario de gran magnitud, su incidencia ha disminuido poco
a pesar de la reducción de la mortalidad en las enfermedades cardiovasculares
en los últimos años.
"En la mayoría de las víctimas la
muerte súbita se produce de forma inesperada, sin síntomas previos, ni
factores que permitan identificarlas como población de riesgo, y
desafortunadamente tan solo un 5% sobreviven sin secuelas".
Más del 85% de todas las muertes súbitas
son de origen cardíaco y más del 90% de los casos se producen fuera del
hospital.
En un 85% de las personas que sufren parada
cardiaca extrahospitalaria, es decir, muerte súbita, la causa es un trastorno
del ritmo cardíaco denominado Fibrilación Ventricular.
"La llave del éxito en el tratamiento
de la muerte súbita es la desfibrilación precoz"
La desfibrilación es un tratamiento eléctrico
que, aplicado en los primeros minutos, constituye la medida más eficaz para
restablecer la circulación espontánea en casos de muerte súbita.
Cuanto más rápido se efectúe la
desfibrilación mejor es el pronóstico; por cada minuto que se retrasa la misma
la supervivencia disminuye entre un 7 y un 10%.
La desfibrilación precoz combinada con:
Constituyen
la "CADENA DE SUPERVIVENCIA", que bien desarrollada permite
recuperar sin secuelas a un buen número de víctimas de parada
cardiorrespiratoria.
La
importancia de la desfibrilación para el éxito en la recuperación de la
parada cardíaca ha movido a las autoridades sanitarias y a las sociedades científicas
a promover el uso de los desfibriladores por las primeras personas que actúan
en las situaciones de emergencias.
El
perfeccionamiento de los desfibriladores semiautomáticos ha simplificado su
utilización en el reconocimiento de los trastornos del ritmo cardíaco y su
tratamiento eléctrico eliminando los complicados entrenamientos para su uso.
La
introducción de estos desfibriladores semiautomáticos ha impulsado el concepto
de "ACCESO PÚBLICO A LA DESFIBRILACIÓN", basado en un
razonamiento deductivo:
"si la desfibrilación precoz mejora la
supervivencia de la muerte súbita de origen cardíaco, el incremento a la
disponibilidad y acceso a los desfibriladores permite una desfibrilación más rápida
y, por tanto, un mejor pronóstico".
¿QUÉ
ES UN DESFIBRILADOR SEMIAUTOMÁTICO EXTERNO?
El desfibrilador semiautomático externo es
un equipo con un sistema computerizado de análisis del ritmo cardíaco que
monitoriza el ritmo del corazón y, si está indicado, libera un choque eléctrico
sin necesidad de que el personal que lo utiliza sepa reconocer los ritmos cardíacos;
únicamente debe poner los electrodos adhesivos en la persona a tratar.
Existen dos tipos de desfibriladores: automáticos
y semiautomáticos; el primero solo requiere que los electrodos estén aplicados
al paciente y que el aparato esté encendido; si está indicado libera la
descarga enviando previamente una señal acústica de aviso, como medida de
seguridad, que indica la inmediata liberación de dicho choque a menos que se
anule manualmente el sistema.
Los desfibriladores externos semiautomáticos
requieren que el operador presione el botón de analizar para que el aparato
inicie el análisis del ritmo cardíaco, y el botón de choque para liberar la
descarga eléctrica. Estos se consideran más seguros ya que es el operador el
que tiene la última decisión de realizar o no el choque eléctrico.
Las recomendaciones internacionales
exigen que los desfibriladores sean:
En los últimos años ha cobrado gran interés
el uso de desfibriladores por las primeras personas que acuden al lugar donde se
encuentra una víctima, portando un desfibrilador semiautomático y estando
entrenados y autorizados en su manejo.
Actualmente
se reconocen cuatro niveles de uso público de los Desfibriladores:
Nivel 1:
Desfibrilación por primeros auxiliadores en
situaciones de emergencias, representados por las unidades de Soporte Vital
Avanzado ó UVIs móviles de los Sistemas de Emergencias Médicas en nuestro país
y constituidos por policías, personal de ambulancias y bomberos en países sin
Sistemas de Emergencias Medicalizados.
Nivel 2:
Desfibrilación por primeros auxiliadores no
tradicionales: guardaespaldas, personal de seguridad y personal de vuelo en líneas
aéreas.
Nivel 3:
Desfibrilación por ciudadanos que han
recibido entrenamiento en su utilización, generalmente en el seno de programas
con un familiar de alto riesgo de muerte súbita.
Nivel 4:
Desfibrilación por cualquier ciudadano (solo
aplicable en el futuro con la mejoría de las tecnologías y con el desarrollo
de la telemedicina).
Una vez optimizado el
Nivel 1 con el desarrollo de los Sistemas de Emergencias Médicas, se plantea
comenzar con el 2º nivel. Actualmente varias compañías aéreas han
desarrollado programas de implantación de Desfibrilación semiautomática en
vuelo tras el éxito de un programa de tratamiento de la parada cardíaca en
vuelo por la compañía Australiana Quantas Airline, estimando que la mortalidad
por parada cardíaca en aviones comerciales es tan alta como 1000 personas/año,
similares a las cifras de fallecidos por accidente aéreo.
OBJETIVOS
El proyecto de Desfibrilación Semiautomática
persigue los siguientes objetivos: